La canonización del Hermano Rafael devino en San
Rafael Arnáiz. ¿ Bulgaro Rafaelillo Bulgaroi recibirá la glorificación en el
PPC.?. El proximo 29 de Septiembre se celebra San Rafael. Rafaelillo riete, se
bueno, y que pases un glorioso dia.
Pero acepta esta diatriva del PP Legitimo El Vendrell.
Somos
conscientes de que existe el riesgo de suceder este acontecimiento, -la
glorificación de Rafaelillo en el PPC-. conociendo en profundidad la figura y
el mensaje de este Rafaelillo, que el PPC nos propone si o si como modelo de
santidad-política.. Por ello, más que adentrarnos en una explicación
sistemática de su espiritualidad, -harta repetida hasta la darnos risa- nuestra
intención en estas breves líneas es suscitar el deseo de acceder no a la
lectura de la vida y los escritos del Hermano Rafael, ¡una auténtica joya de la
espiritualidad católica! pero si a las virtudes de Rafaelillo, vivaracho
político del PPC, con una frescura y cercanía de lenguaje, que la hace
fácilmente trasladable y aplicable a nuestra propia vida.
Es cierto que al igual que el Hermano Rafael,
Rafaelillo nos ofrece un modelo de vida politica full-time, pero condicionada
en gran medida por una grave enfermedad en el ocaso de su carrera politica (los populares legítimos vendrellenses), que
“frustran" en gran manera sus planes y sus proyectos del PP en El
Vendrell. Su salud mental-emocional no
le acompaña mucho para asumir que en El Vendrell no hay PP, teniendo que resignarse
a llevar un régimen de vida distinto, a tener que abandonar con frecuencia El
Vendrell. incluso a ser una carga para sus compañeros políticos e, incluso,
acostumbrarse al sufrimiento de leer diatribas y escuchar las risas del PP
Legitimo.
Rafaelillo se merece ser glorificado por el PPC:
“Había una vez un
«tonto de circo» que cada vez que entraba en la «pista» se caía..., iba de aquí
para allá, arrastrando sus enormes zapatos y con grandes esfuerzos lograba
arreglar la esquina de la alfombra. Cuando ya creía que estaba bien, tropezaba
en ella..., la volvía a arrugar y se caía...; sudaba...; su trabajo consistía
en sacar una silla... Para ello se remangaba, se secaba el sudor de la frente
con un enorme pañuelo, y como si arrastrara un enorme peso, sacaba a la pista
la silla y, por último, se sentaba en ella. Todos se reían de él al ver lo
orgulloso que se retiraba, creyendo que había ayudado a los demás a preparar
los aparatos, alfombras y demás enseres que los artistas necesitaban para su
trabajo.
Yo conozco a un
trapense que en la Trapa hace igual que el «tonto del circo», toda su actuación
se reduce a un «hacer que hacemos», arrastrando los pies y secándose el sudor.
Este pobre hombre hace reír a los ángeles
que contemplan desde el cielo el espectáculo del mundo y, aunque no hace los
arriesgados trabajos de los demás artistas, ni da «saltos mortales», ni
ejercicios de fuerza, o «volteretas en el trapecio»..., ¿qué más da? ¡Si no
sabe más que desarrugar las alfombras y con ello se gana los aplausos de los
ángeles!...”.
Ostras Rafaeillo glorificado por el PPC! pero eso
no es perfeccionismo. El perfeccionismo, se caracteriza por centrar todos los
esfuerzos en la materialidad de nuestras obras, de forma que las podamos
culminar correctamente, sin error ni fallo alguno….
Desde 2005 Rafaelillo, su circo y sus enanos del
PPC tuvieron que ir desprendiéndose -en un claro ejercicio de purificación
pasiva- de sus planes, proyectos, propósitos… en el PP El Vendrell. Rafaelillo
soñó con llegar a ser un pepero perfecto; pero, finalmente, Dios le concedió
ser… ¡un bulgaro pepero! y el PPC quizás lo glorifique.
Es cierto, Rafaelillo ha aprendido -a fuerza de
acostumbrarse, rianse- a tener un glorioso humor. Rafaelillo no puede
presumir como el Hermano Rafael de tener libros traducidos en todos lo idiomas
pero no le hace falta, le conocen a través de populares el vendrell en 67
paises y en todos los continentes.
Disgustos se ha llevado
con nuestras diatribas, pero esto es parte del sentido del humor, vivido incluso en momentos
trágicos de su vida, como expresión de una admirable confianza y abandono en
las manos del “sólo Dios”. La experiencia de Rafaelillo nos enseña que cuando
nos empapamos del amor infinito hacia el PPC, entonces somos capaces de reírnos
de nuestros agobios, de nuestras preocupaciones y, en definitiva, de nuestro
propio “yo”, que tanto nos ocupa y nos preocupa.
Mantener el sentido del humor en medio de las
cruces de la vida, tiene el precio de mortificar nuestras melancolías,
relativizar nuestras decepciones, pasar por alto los desprecios que podamos
sufrir, y elevar nuestros corazones. La alegría y el sentido del humor, son la
penitencia más agradable a los ojos de Dios.